Pasar por la pescadería y que las parrochinas te miren con los ojos brillantes es algo que me vuelve loca y me entran unas ganas de llevármelas «pa»casa que no puedo soportar.
Me diréis que el problema de las parrochas es que huelen mucho al freírlas y que eso da cierta pereza, no os voy a decir lo buenísimas que son para la salud, ni que podéis hacerlas al horno para evitar en lo posible los humos, pero sí que os voy a contar una recetilla que aunque no os libra de la fritura, si que podéis tenerlas hechas pronto para poder ventilar. Otra cosina que anima a hacerlas es que si no es en casa, no las catas. Parrochas escabechadas.
Ingredientes para 3 personas:
500grs. de parrocha fresca (que tengan los ojos brillantes)
1/2 cebolla
1 diente de ajo
1 plato de harina
1 cucharadita de pimentón del bueno
bolas de pimienta negra
aceite de oliva virgen extra
vinagre del bueno
sal y una hoja de laurel
Modo de hacerlo:
Primeramente tendréis que decir al pescadero que os limpie el pescado y les quiten la cabeza. Una vez llegadas las parrochinas a casa las pasáis por el grifo de agua fría y las ponéis sobre papel de cocina a secar. Salarlas por ambos lados y pasarlas por harina.
Vais friendo las parrochas por tandas (para esto yo uso aceite de oliva 0,4) y las ponéis en una fuente de bordes altos.
Picáis la cebolla finamente y en una sartén pequeña, con medio vaso de aceite de oliva virgen extra la pochamos junto con el diente de ajo entero, la hojita de laurel y las bolas de pimienta (unas 10), hasta que cambie de color y quede transparente. Añadís el pimentón , 1/3 de vaso de vinagre y dais un hervor.Echáis el escabeche por encima de las parrochas y las reservamos de un día para otro tapadas con un film transparente (si hace calor mejor en la nevera, sacándolas un rato antes de comer para que atemperen).
Tener en cuenta que estas parrochas se pueden guardar dos o tres días. Para acompañarlas yo recomiendo unas patatas cocidas que quedan buenísimas impregnadas en el escabeche. Un beso.