Esta receta no es apta para los prisucas, sencilla es un rato largo, pero hay que tomárselo con calma.
En esta ocasión, aunque el título es rabo de toro, he de decir que lo que guisé fue rabo de buey (sospecho que de vaca vieja), la receta es idéntica con lo que puedes usar lo que más te convenga, que será la que tengas a mano.
Ingredientes para 4 personas:
1 rabo como de 1 y 1/2 kl.
2 cebollas grandes
3 zanahorias grandes
1 pimiento rojo grande
3-4 dientes de ajo
harina
brandy
chocolate a la taza
vino tinto, curiosín sin pasarse
sal, pimienta, laurel y tomillo
Modo de hacerlo:
Salpimienta generosamente el rabo que tienes que tener bien limpio y seco. Pásalo por harina, sin que te queden pegotones (conviene que sacudas los trozos) y en una buena cacerola (yo usé mi maravillosa pota de hierro), con aceite de oliva virgen extra (que cubra bien el fondo) dora los trozos de carne por todos los lados. Resérvalos.
En el aceite de freír el rabo pocha las verduras con una pizca de sal. La cebolla, el pimiento y el ajo cortados en trocitos pequeños, la zanahoria yo la piqué en picadora. Pon el fuego a temperatura media y espera que las verduras estén bien blanditas.
Una vez que tienes las verduritas como tienen que estar, sube el fuego y añade 1/2 vaso de brandy, rápidamente acerca una cerilla y deja que queme el alcohol sin quemarte las pestañas.
Mete en la pota el rabo, el vino (1/2 l. más o menos), si para que cubra la carne necesitas más líquido añade agua. Pon una hoja de laurel y un poco de tomillo, comprueba el punto de sazón y baja el fuego para que hierva lentamente.
Cuando quieras hacer guisos de carne es conveniente que uses ollas que tengan un tamaño adecuado a la cantidad de esta que quieras hacer, no uses potas muy grandes (tendrás que echar mucho líquido para cubrir la carne) ni muy pequeñas donde todo quede muy apretujado.
Horas más tarde, para ser precisa 3, y ya un poco cansadita de que mi rabo no cogiera la textura melosa deseada, la metí en la olla exprés y la dejé 20 minutos, quedó perfecta (deja que caliente sin poner el fuego muy alto pues tiende a pegarse).
Saca la carne para un plato y para rematar la faena (¡olé!) arregla la salsa con 1/2 onza de chocolate, Vuelve a añadir la carne y da un hervor.
Ya ves que la receta no tiene gran ciencia, poco más que una carne guisada, pero requiere que te tomes tu tiempo, no tengo que decirte que en la cocina muchas veces lo más importante es el tiempo, bien es verdad que tampoco tienes por que estar toda la tarde mirando para ella. Un beso