Puesta una a meterse en berenjenales, nada como hacerlo con lo que más me gusta: cocinando. Es evidente que cuando comencé el blog, ya tenía una larga experiencia como cocinillas, eso si, usaba mis habilidades para agasajo de amigos y familiares. El paso lógico de todo este despliegue teórico culinario, y por lo tanto nuevo reto, era comprobar mi capacidad para cocinar más allá de una comida familiar o de amigos. Y manos a la obra: cenita para una treintena de personas en el Club de Golf de La Fresneda.
Lo primero que me plantee es que quería un ambiente agradable, con mesas bonitamente presentadas y un servicio amable y diligente, cosa que conseguí gracias al buen hacer del equipo de personas que regentan el Club de Golf de La Fresneda, gracias chicos.
Elmenú que elegí para esta ocasión es una pequeña muestra de platos que podéis encontrar en mi blog y que reflejan el espíritu que me mueve en la cocina.
Comenzamos con unos langostinos de crujiente rebozado, acompañado por un par de salsitas.
Seguidamente servimos unos vasitos de crema de setas con su sofrito que a mi personalmente me encantan.
Como no hay dos sin tres, al vasito le siguió un espárrago relleno de salmón ahumado napado con una salsa de oricios que tuvo una gran aceptación por parte de los comensales.
Como plato de carne me decanté por un vitello tonnato, receta que yo he incorporado recientemente a mi recetario y que gusta mucho. Lo acompañe con una estupenda ensalada de patata al estilo alemán que combina muy bien con este plato.
Para terminar, el toque dulce lo puso una cremita de limón de textura acuosa que ayuda a hacer la digestión.
Una vez terminada la cena y pasados los nervios iniciales, pude comprobar, con gran alegría , que todo había salido según yo tenía planeado y sólo me queda agradecer a todos los que me han animado y apoyado en este nuevo camino que aquí he iniciado. Un beso.